Si creciste en los 90, seguro que te acuerdas de la mierda de juegos que sacaban de películas. Alien, Predator, Terminator… todas esas pelis míticas que podían haber sido juegazos, pero que terminaban siendo bodrios hechos en dos días por Acclaim o LJN. Terminator 2D No Fate llega en 2025 queriendo ser ese juego de T2 que debimos tener hace más de 30 años. Y lo mejor es que casi lo consigue.
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Gameplay y gráficos de Terminator 2D No Fate
Terminator 2D No Fate es básicamente Metal Slug o Contra, pero con la licencia de Terminator 2. Gráficos pixel art que parecen sacados de una recreativa de los 90, música brutal con remixes del tema mítico de la peli, y jugabilidad simple pero efectiva.
Corres, disparas, recoges power-ups, esquivas enemigos y revientas todo lo que se mueve. Los niveles son cortos pero intensos, con escenas clave de la película recreadas en plan videojuego vieja escuela. El apartado visual es espectacular, con animaciones fluidas y un diseño artístico que clava esa estética retro futurista.
Funciona genial en Switch 2, que es donde he jugado al juego. Solo hubo un momento de slowdown en toda la partida, pero ni siquiera está claro si era por el hardware o simplemente efecto estilo. Los controles son fluidos, aunque el salto tiene una física un poco rara al principio. Te acostumbras rápido, pero la inercia no termina de sentirse del todo bien comparado con otros run and gun modernos.
Cuánto dura Terminator 2D No Fate
Aquí está la bomba. Puedes terminarte todo el juego en menos de 4 horas. Y cuando digo todo, es TODO. La campaña principal no llega ni a una hora si vas a saco. Es un juego arcade de toda la vida, diseñado para ser breve y rejugable.
Para compensar la duración tiene varios modos extra. Está el modo historia normal, uno arcade sin cinemáticas, un modo infinito de supervivencia, boss rush que se desbloquea al completar el juego, y el modo Mother of the Future que es una versión alternativa de la campaña. Con todas las rutas, dificultades y modos llegas a esas 4 horas.
El remake de Code Veronica se anunciaría en 2026 y saldría en 2027, con Claire Redfield como personaje principal según filtraciones.
El problema es el precio. 30 pavos por 4 horas de contenido es bastante, sobre todo cuando la historia principal dura menos que una peli. Si eres superfan de Terminator o te flipa este tipo de juegos retro, puede que te compense. Pero para el resto lo suyo es pillarlo rebajado. A 20 euros ya es más recomendable, y si baja a 10 es compra directa sin pensarlo.
Terminator 2D No Fate precio
El juego cuesta 30 euros y es el tema más polémico. Para lo que ofrece en términos de duración pura, es caro. Pero hay que entender que está diseñado para rejugarse varias veces en diferentes dificultades, con distintas rutas y modos de juego.
La calidad del pixel art es de las mejores que vas a ver en un juego retro moderno. La banda sonora es increíble, con remixes del tema de Terminator que le dan toda la energía que necesita un shooter frenético. Y la jugabilidad, aunque tiene sus cosillas, funciona muy bien.
Si eres del público objetivo, fan de Terminator o nostálgico de los run and gun clásicos, probablemente te merezca la pena a precio completo. Para el resto, mejor esperar ofertas. A mitad de precio es mucho más fácil de recomendar, y por 10 dólares no hay excusa para no pillarlo.
Qué es el modo No Fate y las decisiones
Vendieron mucho el tema de que el juego tiene decisiones que cambian la historia, incluso sacaron un tráiler diciendo que no podían contar nada para no hacer spoilers. Pues bien, spoilers, solo hay dos putos momentos de decisión en todo el juego.
Ambos llegan después del capítulo 8, cuando ya has pasado más de la mitad. Las decisiones son si dejas que el Terminator se libere o no, y si matas o perdonas a Miles Dyson. Y aquí viene lo peor, apenas cambian nada. La ruta donde matas a Dyson es básicamente la misma pero más corta, porque te quitan los niveles donde juegas con el Terminator.
La primera ruta alternativa tiene algo de chicha y merece la pena verla una vez, pero vender esto como un sistema de decisiones importantes es exagerar muchísimo. Para un juego que se llama literalmente «No Fate» y presume de que puedes cambiar el destino, se queda muy corto. Tres pasadas completas por un par de cambios menores es pedir demasiado.
Es la parte más decepcionante del juego, porque lo anunciaron como algo gordo y al final es bastante anémico. No hay suficiente contenido nuevo como para justificar que te pases la campaña tres veces solo por esto.
Personajes jugables en Terminator 2D No Fate
Otra cosa rara es que apenas juegas con el Terminator de Arnold. La mayor parte del tiempo controlas a Sarah Connor o a John Connor adulto del futuro, que está bien, pero tío, el juego se llama Terminator. Con Arnold solo juegas dos niveles y son la hostia, lo cual hace que joda más que sean tan pocos.
Encima hay un nivel donde Arnold usa la minigun, que es una escena icónica de la peli, y lo han metido en la ruta alternativa en lugar de en la campaña principal. No tiene mucho sentido. Tampoco hay pelea de jefe contra el T-1000, que es el puto villano de la película. Respetan tanto el guion original que a veces se pasan de conservadores.
Lo curioso es que el juego empieza con Baby John siendo secuestrado por un tal Bandit Bob, algo que no pasa en la peli. O sea, se permiten inventarse cosas, pero luego no se atreven a meter una pelea épica contra el T-1000. No cuadra.
Mejores niveles de Terminator 2D No Fate
Los niveles ambientados en el futuro con robots y guerra nuclear son los mejores del juego. Cuando te lo cuentan piensas que lo guay va a ser recrear escenas de la película, pero no. Las partes inventadas del futuro distópico son las que más molan y donde el juego se suelta de verdad.
Los niveles basados en la peli están bien, pero son más conservadores y predecibles. En cambio, cuando te mandan al futuro a reventar Terminators y HKs el juego se pone salvaje. Tiene sentido, porque ahí se pueden inventar lo que quieran sin tener que respetar el guion.
Esa mezcla rara entre escenas de la película y niveles inventados funciona precisamente porque es un juego licenciado. En cualquier otro contexto sería un despropósito, pero aquí le da ese aire auténtico de juego de película de los 90 donde mezclaban de todo sin mucho sentido. Incluso hay un nivel de conducción y otro donde te pegas con gente mientras vas desnudo como Arnold. Es ridículo pero funciona.
Dificultad recomendada para Terminator 2D No Fate
Normal está bien para la primera pasada y para pillarle el rollo al juego, pero la dificultad difícil es donde Terminator 2D No Fate brilla de verdad. Ahí sí que se nota la calidad, con enemigos más agresivos, en mayor cantidad, menos continues, y un ritmo que te obliga a estar al 100%.
Se convierte en Metal Slug puro, con pantallas llenísimas de enemigos y balas por todos lados. El problema es que no se recomienda empezar directamente en difícil porque los cambios de estilo de juego y esa física de salto rara necesitan un rato de adaptación. Hay también varios momentos de muerte instantánea que tienes que conocer de antes.
Pero una vez que ya sabes qué esperar y dominas los controles, rejogar el juego en difícil es la experiencia definitiva. Ahí es donde entiendes por qué este juego pide varias partidas para sacarle todo el jugo. Incluso el nivel de sigilo, que podría ser un coñazo, dura solo unos minutos y no llega a molestar.
¿Terminator 2D No Fate vale la pena?
Terminator 2D No Fate es muy buen juego, pero tiene pegas claras. No es el mejor run and gun del año ni de lejos, hay otros como Neon Inferno que lo superan. Pero la calidad está ahí, el pixel art es precioso, la música engancha, y la jugabilidad funciona.
Para fans de Terminator es compra segura. Para fans de shooters retro depende del precio que le veas. A 30 euros es caro para lo poco que dura, aunque la rejugabilidad está pensada. A 20 ya es más razonable, y a 10 es regalo.
Es una pena, porque con un poco más de contenido y decisiones de verdad esto podría haber sido un juegazo memorable. Tal como está es muy bueno, el juego de T2 que merecíamos en los 90, pero se queda a las puertas de ser algo realmente especial. Le falta ese último empujón para ser realmente un clásico en lugar de simplemente un muy buen juego retro.
